Cuando el 11 de marzo de 1958 los integrantes de la Columna 6 del Ejército Rebelde llegaban al lugar conocido por Piloto del Medio, en el municipio San Luis, quedaba oficialmente constituido del Segundo Frente Oriental Frank País García, al mando del Comandante Raúl Castro Ruz.
La creación de este nuevo frente, al igual que el Segundo Frente en días anteriores, se correspondía con la estrategia del mando rebelde de extender la guerra revolucionaria en la otrora provincia de Oriente, con el objetivo de pasar a la ofensiva final contra las tropas de la tiranía batistiana.
El Segundo Frente Oriental Frank País García se extendió por una superficie de 12 000 kilómetros cuadrados, abarcando los entonces municipios de Mayarí, Sagua de Tánamo, Baracoa, Yateras, Guantánamo, Alto Songo y San Luis, extendiéndose posteriormente, hasta Antilla Y Banes.
En este amplio territorio, muy rico en tradiciones de lucha, operaron seis columnas, además de contar con Unidades Móviles de Choque y la Fuerza Aérea Rebelde, la cual llegó a contar con más de una docena de aviones en uso, en apoyo a la lucha del Ejército Rebelde en toda la provincia de Oriente.
En los casi nueve meses de existencia del Segundo Frente se efectuaron 248 acciones causándoles al enemigo unas 1979 bajas y apoderándose de más de 1216 armas largas. Además, aquí se llevó a cabo la Operación Antiaérea, con la captura de 47 ciudadanos norteamericanos, incluidos 27 marines de la Base Naval de Caimanera, para impedir que la aviación de la tiranía, con el apoyo de Estados Unidos, continuara bombardeando y masacrando a la población oriental.
En territorio del Segundo Frente Oriental Frank País García, se efectuaron también los Congresos Campesino y Obrero en Armas, los que sirvieron para poner en práctica la firma y necesarias alianzas de ambos sectores con el Ejército Rebelde, en apoyo a la Revolución Cubana.
La constitución del Segundo Frente Oriental, el 11 de marzo de 1958, más que un simple hecho, constituyó una proeza militar y organizativa, que posteriormente, y tras el triunfo, daría vida a un nuevo y pujante territorio que sacó del olvido a sus habitantes y llevó hasta los más recónditos lugares, el desarrollo económico y social con todas las ventajas que ello representa.
Al recordar hoy el aniversario 54 de esta proeza, hagámoslo con el pensamiento y el corazón puestos en aquellos fundadores que confiaron siempre en la victoria y en los casi 200 combatientes que ofrendaron sus vidas en este territorio, donde la Revolución les construyó un digno y hermoso mausoleo, para que vivan eternamente en el recuerdo de su pueblo.
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