Autor :Israel Hernández Planas
La recuperación de materias primas tiene un lugar meritorio en Santiago de Cuba al ahorrar al país grandes sumas de dinero por concepto de sustitución de importaciones. Botellas de licores y cervezas, envases para píldoras, tejas y tanques de fibrocemento son algunos de los productos por los cuales Cuba no tiene porqué desembolsar grandes cantidades de dólares en el mercado extranjero.
Demostrado está en Santiago de Cuba donde la Empresa Recuperadora de Materias Primas ha logrado recobrar los elementos utilizados en la fabricación de estos enseres, destinados a diversas industrias cubanas. Así el acero que se obtiene es destinado a los laminadores de Las Tunas y Santiago de Cuba, para conformar las barras conocidas como cabillas, de gran demanda en el sector de la construcción.
Aluminio, cobre, bronce y acero inoxidable son otros componentes obtenidos de la chatarra, que tras su rescate se tornan elementos valiosísimos y por consiguiente un considerable ingreso de divisas al país.
"Es un proceso que aporta muchísimo al país y que en estos momentos marcha a un buen ritmo porque estamos sobrecumpliendo la recuperación de elementos que se cotizan muy bien en el mercado internacional. Los suministradores de este tipo de chatarra van desde un individuo cualquiera que asiste a nuestras casa de compra y cambio hasta las grandes empresas como la Eléctrica y la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba que aportan muchísimos desechos que luego nosotros reutilizamos", explica Arismel Céspedes Borrero, Director de la Empresa Recuperadora de Materias Primas en Santiago de Cuba.
Es en unas gigantescas naves ubicadas en las afueras de la ciudad donde la basura deja su estado de desecho para convertirse en pulpas de papel, bloques de aluminio y pastas plásticas por solo mencionar algunas de las materias primas obtenidas. Sin embargo especialistas de esta empresa consideran que pudiera obtenerse mucho más.
"Se ha ganado en la cultura del reciclaje en el sector residencial. Ahora indudablemente se obtiene más de los desechos pero falta muchísimo por recuperar. Lo veo yo en los camiones colectores de basura como se desechan cosas que nosotros podemos rescatar", dice Miguel Terán Colón un jubilado de la empresa que trabajó al servicio de la misma durante 42 años.
En un recorrido por la base de oxicorte se comprende porque los operarios son verdaderos reyes midas: convierten en oro todo lo que tocan. Hasta la fecha han recuperado más de 18 500 toneladas de acero, un producto cuyo valor internacional ronda los 400 dólares la tonelada. Su mentalidad es siempre rescatar lo que se pueda.
Durante medio siglo desde una simple hoja de papel hasta la pesada chatarra, han sido aprovechados por esta empresa santiaguera que hace del reciclaje una vía más de ayuda a la economía nacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario