Por Kenia Tabares Robles/Foto Jose Vladimir Perez
Santiago de Cuba, 15 jun.— Con unos complejos utiles, Gustavo Ruiz Roca vence la estructura fisica del maármol y el granito, una habillidad que requiere de manos seguras, fuerza y dominio. Su destreza en el complejo oficio de tallar, avalan los multiples trabajos en los monumentos funerarios del Cementerio Patrimonial Santa Ifigenia.
Desde el ano 1989, y gracias a la sabiduria de un amigo, desarrolla una actividad de antigua tradición. Al acercarnos a su trabajo conocimos de su experiencia en el asesoramiento del Equipo de Investigaciones Historicas, Conservacion y Restauracion, del sitio declarado Museo a Cielo Abierto.
El talento de Ruiz Roca le permitió tallar la cripta del Padre de la Patria, Carlos Manuel de Cespedes y realizar acciones de conservacion a la tumba de Mariana Grajales, la Madre de la Patria, durante el reordenamiento del camposanto, Monumento Nacional, en el ano 2017.
Pero aqui y en otras regiones de la provincia Santiago de Cuba, Gustavo, tiene una obra consolidada a lo largo de muchos años. El arte esta en sus manos y en su vista, ellos le dan fuerza para trabajar.
Es así como durante 41 dias talló en bajo relieve con letras Palmers, las nueve tarjas ubicadas en el sendero que conduce al monumento que perpetúa la caída de Céspedes, en San Lorenzo, localidad del Tercer Frente Oriental, asi como el tallado de los monolitos que representan los diferentes campamentos donde estuvo el Primer Presidente de la Republica en Armas.
Otros trabajos representativos son el tallado en alto releieve de las tarjas conmemorativas relacioanadas con el Centenario de la Caída en Combate de José Martí, al igual que la silueta de los rostros de los próceres, Antonio Maceo, Martí y Máximo Gómez, que señalizan los lugares donde fuera expuesto el cadáver del Apóstol, desde el Jobo hasta San Luís.
Textos que senalizan los lugares donde descansan los restos del ultimo médico de Napoleón Bonaparte, del artista Adolfo Llauradó, de los trovadores Pepe Sánchez, Nico Saquito, Pepe Banderas y Miguel Matamoros, el locutor Ado Sanz, y Candelaria Acosta Fontaigne “Cambula”, quien confeccionó la primera bandera de la Guerra de Independencia, por orden de Céspedes, forman parte del patrimonio edificado en monumentos funerarios.
Para Gustavo, su obra más compleja se ubica en la Catedral de la Ciudad Héroe. Se trata de la cripta del primer arzobispo de Cuba, Excmo y Rudmo. Mons. Dr Mariano Rodríguez de Olmedo y Valle. “Por su característica de grabación, las dificultades de los escudos arzobipales con muchos detalles, se merece mi respeto, porque cada vez que veo ese trabajo no puedo creer que lo haya hecho”, manifestó a esta reportera, muy emocionado.
Hace solo unos dias volví a ver a Ruiz Roca, un hombre comín, conversador, apasionado por lo que hace y a decir verdad, sin apariencia de artista. Pero, al conocerlo, tienes ante ti a un hombre profundo que se entrega en cuerpo y alma a su quehacer: el arte funerario.
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