Santiago de Cuba, 18 jul.— A propuesta de la Unión Africana y por Acuerdo de la Asamblea General de la ONU, cada 18 de julio a partir de 2010, quedó establecido como el Día Internacional de Nelson Mandela, en homenaje al natalicio del incansable revolucionario sudafricano, devenido en símbolo de la lucha del continente negro por la unidad, y independencia y contra el racismo.
Mandela, nacido el 18 de julio de 1918
estaría cumpliendo hoy 99 años de vida, 27 de los cuales los pasó
encerrado en cárceles del odioso régimen sudafricano del apartheid,
siendo obligado a trabajo forzado en una cantera de sal y recibió
numerosas torturas síquicas no logrando con ello quebrantar su espíritu
de lucha ni que abandonara el camino de su libertad.
Desde la propia cárcel Mandiba, como ella llamado, continuó dirigiendo la lucha de su pueblo contra el apartheid, fue fundador del Congreso Nacional Africano, lo que aumentó su prestigio ante la comunidad internacional, a pesar de los intentos de sus enemigos por callar a este hombre que lejos de amilanarse tenía cada día más fe en la victoria señalando: “No importan los sacrificios cuando se lucha por principios sagrados”
En la cárcel, Nelson Mandela supo del internacionalismo de los cubanos en Angola y otros países africanos, y se regocijó de la victoria de Cuito Cuanavale la cual calificó como: “el viraje de la lucha de liberación del continente africano contra el flagelo del apartheid”
En 1990 Mandiba fue puesto en libertad y en 1994 se convirtió en el primer Presidente electo de su país, desde donde encabezó el proceso de reconciliación nacional que puso fin para siempre en Sudáfrica al régimen racista del apartheid.
Aunque a este aniversario 98 del natalicio de Nelson Mandela se llega cuando se han cumplido cuatro años de su fallecimiento y los cubanos los recuerdan hoy como el gran amigo que fue de la revolución y del Comandante en Jefe Fidel Castro, ratificando ante su memoria que nuestro pueblo estará siempre al lado de los africanos y dispuesto por ellos a dar hasta su propia sangre como lo hizo en Angola y otros países del continente negro.
Desde la propia cárcel Mandiba, como ella llamado, continuó dirigiendo la lucha de su pueblo contra el apartheid, fue fundador del Congreso Nacional Africano, lo que aumentó su prestigio ante la comunidad internacional, a pesar de los intentos de sus enemigos por callar a este hombre que lejos de amilanarse tenía cada día más fe en la victoria señalando: “No importan los sacrificios cuando se lucha por principios sagrados”
En la cárcel, Nelson Mandela supo del internacionalismo de los cubanos en Angola y otros países africanos, y se regocijó de la victoria de Cuito Cuanavale la cual calificó como: “el viraje de la lucha de liberación del continente africano contra el flagelo del apartheid”
En 1990 Mandiba fue puesto en libertad y en 1994 se convirtió en el primer Presidente electo de su país, desde donde encabezó el proceso de reconciliación nacional que puso fin para siempre en Sudáfrica al régimen racista del apartheid.
Aunque a este aniversario 98 del natalicio de Nelson Mandela se llega cuando se han cumplido cuatro años de su fallecimiento y los cubanos los recuerdan hoy como el gran amigo que fue de la revolución y del Comandante en Jefe Fidel Castro, ratificando ante su memoria que nuestro pueblo estará siempre al lado de los africanos y dispuesto por ellos a dar hasta su propia sangre como lo hizo en Angola y otros países del continente negro.
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