Por Rosalina Tamayo Arañó y Ramón E. Suárez
Palma Soriano, santiago de Cuba, 15 may.— Por estos días varios tractores de servicios de comunales vuelven a prestar su ayuda en las importantes tareas de higienización en varias ciudades de Guantánamo y Santiago de Cuba gracias a la reparación capital que se le brinda en la base de talleres de azutenia de Palma Soriano.
Palma Soriano, santiago de Cuba, 15 may.— Por estos días varios tractores de servicios de comunales vuelven a prestar su ayuda en las importantes tareas de higienización en varias ciudades de Guantánamo y Santiago de Cuba gracias a la reparación capital que se le brinda en la base de talleres de azutenia de Palma Soriano.
En la primera etapa el contrato
incluye la reconstrucción de15 equipos y una misma cantidad para la
segunda que comenzará en el mes de julio nos comenta Juan Carlos Reyes,
mecánico A “que los equipos llegan en muy malas condiciones, incluso
faltándoles hasta el 50 por ciento de los recursos, innovamos varios de
los que ellos necesitan, algunas piezas que son baja, la recuperamos.”
“La reconstrucción que reciben los tractores incluyen cambios de llantas y chapistería” nos dice Luis Carlos Vaillant, jefe del taller, “los motores lo mandamos a reparar a una UEB de nuestra propia empresa en Holguín.”
Nos encontramos con un tractor amarillo del municipio de Contramaestre que es el segundo que se repara aquí pues ya el primero está rodando por las calles de la tierra de los cítricos.
Yordanis Valdés Silva, Jefe de Transporte de Comunales en Contramaestre nos comenta “que realmente estos equipos llegan con muy mal estado, tienen más de 20 años de explotación, con piezas reparadas varias veces y muchas soldaduras, realmente hay que inventar para poder trabajar y de este taller salen prácticamente con todo nuevo, una mecánica en perfecto estado, pintados y con un trabajo de mucha calidad.”
Además del impacto social por la función que cumplen estos equipos debemos resaltar que el taller de azutecnia en Palma Soriano recauda de 16 a 30 mil pesos por cada tractor reparado y todo ello sin descuidar su objeto social que es la reparación y construcción de piezas para las maquinarias agrícolas del grupo azucarero.
“La reconstrucción que reciben los tractores incluyen cambios de llantas y chapistería” nos dice Luis Carlos Vaillant, jefe del taller, “los motores lo mandamos a reparar a una UEB de nuestra propia empresa en Holguín.”
Nos encontramos con un tractor amarillo del municipio de Contramaestre que es el segundo que se repara aquí pues ya el primero está rodando por las calles de la tierra de los cítricos.
Yordanis Valdés Silva, Jefe de Transporte de Comunales en Contramaestre nos comenta “que realmente estos equipos llegan con muy mal estado, tienen más de 20 años de explotación, con piezas reparadas varias veces y muchas soldaduras, realmente hay que inventar para poder trabajar y de este taller salen prácticamente con todo nuevo, una mecánica en perfecto estado, pintados y con un trabajo de mucha calidad.”
Además del impacto social por la función que cumplen estos equipos debemos resaltar que el taller de azutecnia en Palma Soriano recauda de 16 a 30 mil pesos por cada tractor reparado y todo ello sin descuidar su objeto social que es la reparación y construcción de piezas para las maquinarias agrícolas del grupo azucarero.
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