Por Miralis Despaigne PinedaPalma Soriano, Santiago de Cuba, 7 ene.— Enriquecida con el devenir de la Tierra del Cauto, la cultura palmera cerró un periodo en el que dejó huellas imborrables en la espiritualidad de este pueblo. Momentos importantes se vivieron en el torrente espiritual de doce meses. Como rescate de un patrimonio intangible, volvió Palma Soriano a ser sede del Evento Nacional de Charanga, con el nombre de "Fiesta de la música Charanguera Iván Bychkó In Memoriam", en homenaje a este gran músico que inició el movimiento charanguero desde esta localidad.
Por su parte una verdadera fiesta con la
literatura fue la décimo séptima edición del Festival Municipal de
promoción de la Lectura y el libro, que mostró una vez más el talento de
los escritores Palmeros.
Con el ritmo cubanísimo que corre en nuestras venas se desarrolló en plena calle 26 de julio, de tres días de Fiesta de la danza.
El trabajo patrimonial tuvo logros con la participación de Investigadores locales entre ellos estudiantes en el décimo quinto evento “Monumento de mi Barrio”, auspiciado por la Dirección Provincial de Patrimonio y Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR).
Después de un periodo de reparación el Parque José Martí, área arquitectónica e histórica más importante de la localidad en saludo a los cinco siglos de Santiago de Cuba y 26 de julio, fue entregado con una nueva imagen. En las barriadas e instituciones se mantuvieron los espacios fijos.
La Peña de la Ciudad, Dora manía, en la galería Carlos Manuel de Céspedes destaca en la permanencia cultural. El Karaoke de verano en una versión de gran aceptación continúo en la preferencia popular. Giras de artistas de primer nivel llegaron en diferentes momentos para deleitar a los palmeros.
Relevante fue también la celebración de la Jornada de la Cultura Cubana con todo su esplendor del 10 al 20 de octubre. Y como colofón de todo un año de trabajo llegó XXXVIII Semana de la Cultura Palmera, días en que se resaltó todo el saber cultural y tradicional de esta ciudad, dedicada a los aniversarios 57 de liberada la ciudad, y al del Triunfo de la Revolución, como torrente sublime la cultura de fiesta cerró el 2015 y abrió 2016 con más espiritualidad.
Con el ritmo cubanísimo que corre en nuestras venas se desarrolló en plena calle 26 de julio, de tres días de Fiesta de la danza.
El trabajo patrimonial tuvo logros con la participación de Investigadores locales entre ellos estudiantes en el décimo quinto evento “Monumento de mi Barrio”, auspiciado por la Dirección Provincial de Patrimonio y Los Comités de Defensa de la Revolución (CDR).
Después de un periodo de reparación el Parque José Martí, área arquitectónica e histórica más importante de la localidad en saludo a los cinco siglos de Santiago de Cuba y 26 de julio, fue entregado con una nueva imagen. En las barriadas e instituciones se mantuvieron los espacios fijos.
La Peña de la Ciudad, Dora manía, en la galería Carlos Manuel de Céspedes destaca en la permanencia cultural. El Karaoke de verano en una versión de gran aceptación continúo en la preferencia popular. Giras de artistas de primer nivel llegaron en diferentes momentos para deleitar a los palmeros.
Relevante fue también la celebración de la Jornada de la Cultura Cubana con todo su esplendor del 10 al 20 de octubre. Y como colofón de todo un año de trabajo llegó XXXVIII Semana de la Cultura Palmera, días en que se resaltó todo el saber cultural y tradicional de esta ciudad, dedicada a los aniversarios 57 de liberada la ciudad, y al del Triunfo de la Revolución, como torrente sublime la cultura de fiesta cerró el 2015 y abrió 2016 con más espiritualidad.
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