Por Israel Hernández PlanasSantiago de Cuba, 29 dic.— El Central Paquito Rosales de la provincia Santiago de Cuba alcanzó sus planes de producción de azúcar con unas mil 767 toneladas en la presente zafra chica, logro que permite ir en los días restantes por un sobrecumplimiento especial dedicado a la Ciudad Héroe.
Tan sólo doce días separaron el pitazo
inicial del otro que anunció el fin del cumplimiento en el Paquito
Rosales. La zafra chica comenzó el pasado 15 de abril a las 4 de la
tarde y desde entonces no cesó el flujo de caña hacia este ingenio
santiaguero.
El corte manual en horas de mucho esfuerzo, las excelentes condiciones técnicas del central aparejadas a la exhaustiva supervisión técnica permitieron alcanzar los planes previstos para esta fase productiva.
“Ho
hubo secretos. Fue decisivo el control técnico y las pruebas previas a
la arrancada. Hicimos pruebas de las maquinarias aún sin moler y
posteriormente empezamos a inyectar caña. Cuando empezó la zafra ya
estábamos listo y la supervisión fue continua”, explicó Carlos Calá
Fernández, Director de la Unidad Empresarial de Base Central Azucarero
Paquito Rosales.
Con este adelanto el Paquito Rosales se convierte en el segundo central cubano que logra su plan de azúcar en la zafra chica, pero la jornada sólo les permitió un breve receso a los azucareros para congratularse.
Aún continúa el trasiego de caña hacia esta planta para buscar 500 toneladas, o más, sobre cumplimento que conlleva una motivación especial.
“Pensamos en moler unas 180 toneladas diarias de caña para llegar a la cifra de 500 y hasta pensamos sobrepasar esta cifra pero el número resulta muy emotivo por que la
villa de Santiago de Cuba cumplirá el 2015 su aniversario 500, a eso dedicamos este sobrecumplimiento”, dice Cala Fernández.
Por eso la chimenea del central ubicado en Dos Caminos de San Luis no cesa su efusión. Aquí continuarán los azucareros del Paquito hasta ver engrosado mucho más su plan de azúcar.
El corte manual en horas de mucho esfuerzo, las excelentes condiciones técnicas del central aparejadas a la exhaustiva supervisión técnica permitieron alcanzar los planes previstos para esta fase productiva.
“Ho
hubo secretos. Fue decisivo el control técnico y las pruebas previas a
la arrancada. Hicimos pruebas de las maquinarias aún sin moler y
posteriormente empezamos a inyectar caña. Cuando empezó la zafra ya
estábamos listo y la supervisión fue continua”, explicó Carlos Calá
Fernández, Director de la Unidad Empresarial de Base Central Azucarero
Paquito Rosales.Con este adelanto el Paquito Rosales se convierte en el segundo central cubano que logra su plan de azúcar en la zafra chica, pero la jornada sólo les permitió un breve receso a los azucareros para congratularse.
Aún continúa el trasiego de caña hacia esta planta para buscar 500 toneladas, o más, sobre cumplimento que conlleva una motivación especial.
“Pensamos en moler unas 180 toneladas diarias de caña para llegar a la cifra de 500 y hasta pensamos sobrepasar esta cifra pero el número resulta muy emotivo por que la
villa de Santiago de Cuba cumplirá el 2015 su aniversario 500, a eso dedicamos este sobrecumplimiento”, dice Cala Fernández.
Por eso la chimenea del central ubicado en Dos Caminos de San Luis no cesa su efusión. Aquí continuarán los azucareros del Paquito hasta ver engrosado mucho más su plan de azúcar.
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