Por Bárbara Deás Trobajo
Santiago de Cuba, 22 abr.— El trabajo con los recursos genéticos autóctonos y criollos ha devenido en un alto grado de sensibilización por parte de criadores y técnicos, pero más allá de este logro, constituye una vía para garantizar calidad de vida a pacientes con discapacidad psicomotoras.
Santiago de Cuba, 22 abr.— El trabajo con los recursos genéticos autóctonos y criollos ha devenido en un alto grado de sensibilización por parte de criadores y técnicos, pero más allá de este logro, constituye una vía para garantizar calidad de vida a pacientes con discapacidad psicomotoras.
Los caballos por ejemplo hoy se emplean
con fines médicos y son controlados por terapeutas capacitados para
rehabilitar física, mental, y funcional a los enfermos.
En Santiago de Cuba el Centro de Rehabilitación de Equinoterapia pone en práctica disímiles de opciones para mejoría de las disfunciones neuromotoras de origen neurológicos, traumáticos y degenerativos sobre todo en niños.
Este centro ubicado en el Zoológico santiaguero funciona hace más de cuatro años y brinda los servicios de especialistas de cultura física, de psicopedagogía y de personal médico capacitado para la atención a estas personas en las que se persigue se inserten a la vida social.
Aquí se definen los tratamientos para cada paciente a partir de un expediente clínico y sobre todo sin impedimentos para poder montar jinete en busca siempre de favorecer su desarrollo. Niños con patologías como el PCI, Síndrome de Wess, Autismo, Síndrome de Down, con retraso mental y otros son los que aquí se atienden.
Según especialistas de este centro lo principal para ellos es obtener resultados alentadores de cualquier tipo de terapia siempre contando con la disposición del paciente y familiares de manera agradable, pero para esto la motivación está dirigida a la equitación.
La seguridad es vital en ellos, y sobre todo hacerlos sentir independientes al poder realizar actividades por su cuenta, así como la reacción inmediata de los padres de festejarles sus nuevos logros en complejas actividades, acotaron las especialistas.
Los caballos son animales muy nobles, de una gran dignidad, no se humillan para pedir afecto y capaces de brindar confianza. Su enorme tamaño y poder así como las características de su personalidad e idiosincrasia, les hace especialmente terapéuticos para sicopatías y también para la rehabilitación motora del organismo.
En Santiago de Cuba el Centro de Rehabilitación de Equinoterapia pone en práctica disímiles de opciones para mejoría de las disfunciones neuromotoras de origen neurológicos, traumáticos y degenerativos sobre todo en niños.
Este centro ubicado en el Zoológico santiaguero funciona hace más de cuatro años y brinda los servicios de especialistas de cultura física, de psicopedagogía y de personal médico capacitado para la atención a estas personas en las que se persigue se inserten a la vida social.
Aquí se definen los tratamientos para cada paciente a partir de un expediente clínico y sobre todo sin impedimentos para poder montar jinete en busca siempre de favorecer su desarrollo. Niños con patologías como el PCI, Síndrome de Wess, Autismo, Síndrome de Down, con retraso mental y otros son los que aquí se atienden.
Según especialistas de este centro lo principal para ellos es obtener resultados alentadores de cualquier tipo de terapia siempre contando con la disposición del paciente y familiares de manera agradable, pero para esto la motivación está dirigida a la equitación.
La seguridad es vital en ellos, y sobre todo hacerlos sentir independientes al poder realizar actividades por su cuenta, así como la reacción inmediata de los padres de festejarles sus nuevos logros en complejas actividades, acotaron las especialistas.
Los caballos son animales muy nobles, de una gran dignidad, no se humillan para pedir afecto y capaces de brindar confianza. Su enorme tamaño y poder así como las características de su personalidad e idiosincrasia, les hace especialmente terapéuticos para sicopatías y también para la rehabilitación motora del organismo.
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