Por Aída Quintero Dip
Con motivo de la jornada de homenaje a la épica batalla de Cangamba, del dos al 10 de agosto, los más de 30 santiagueros que participaron en la acción, en 1983, fueron reconocidos en colectivos laborales y en la comunidad donde residen.
Al conmemorarse el aniversario 30 de la heroica gesta, la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana en los nueve municipios intercambió con ellos y destacó el ejemplo que representan, por ser símbolos del valor y la resistencia de los pueblos de Cuba y Angola.
El entonces mayor de las Fuerzas Armadas Revolucionarias Diógenes Bell Sessé recuerda que estaba en la provincia de Moxico y llegó a Cangamba como relevo, pero tuvo que ponerse en posición de combate inmediatamente porque coincidió con el comienzo de la gloriosa batalla que duraría ocho días.
La carta de Fidel fue como una inyección de energía para nosotros, al reunirse cubanos y angolanos se abrazaban y lloraban, era como si hubiese llegado a la zona de ofensiva un refuerzo con tanques, dijo Bell Sessé a la AIN con emoción en la voz y brillo en la mirada.
Confío en el valor de ustedes nos decía, quién podría defraudar la confianza de nuestro Comandante en Jefe?, agregó.
El heroísmo de aquella epopeya fue conmovedor, no hay cómo explicar la valentía de jefes, reservistas y soldados, la mayoría muy jóvenes; en tan difíciles circunstancias nadie pensó en otra cosa que resistir y vencer al enemigo, expresó.
Además recordó episodios de verdadera osadía como las peligrosas misiones cumplidas por los pilotos, o los inolvidables momentos vividos en que hubo que sobreponerse ante el dolor y la muerte de los compañeros.
Pero la Unita tuvo que morder el polvo de la derrota, fue superior el coraje, la entereza y determinación de los grupos de cubanos y angolanos, quienes frustraron el intento de tomar el pueblo y proclamar desde esa zona la República Negra, valoró el especialista militar.
La heroica gesta es considerada como una página trascendente en la historia militar de Cuba en África por el coraje de los participantes, que resistieron ocho días de intensos combates contra tropas muy superiores en hombres y armas.
Este santiaguero se enorgullece de estar entre los héroes de la batalla de Cangamba, él considera su presencia en esa acción militar como el episodio más importante de su vida.
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