Acerca de las experiencias en el enfrentamiento al cambio climático, en particular los impactos sobre el litoral, disertaron ayer expertos de 10 países en la VI Conferencia de Manejo Integrado de Zonas Costeras, en Santiago de Cuba.
A partir de la intervención magistral de Fernando González Bermúdez, viceministro primero de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, de Cuba, los participantes ahondaron en torno a la soberanía científica y tecnológica de las naciones, debate que abrió oficialmente el evento bienal.
González Bermúdez consideró una fortaleza la aplicación de los estudios de peligro y vulnerabilidad costera (actuales y perspectivos), con el empleo del potencial científico tecnológico, junto a toda la sociedad, como contribución al desarrollo sostenible de cualquier país.
Afirmó que las decisiones deben ser tomadas con urgencia, ante un inequívoco y acelerado cambio climático, cuya característica esencial es la del calentamiento global paulatino, visible en la elevación de la temperatura media mundial.
Producto de ello, los océanos aumentan su volumen, sube el nivel del mar y se reduce la capa de hielo del hemisferio norte, significó.
Según pronósticos, resultarán particularmente afectados por el cambio climático, en menos de 100 años, algunos ecosistemas, como los arrecifes de coral, manglares, marismas, tundras y regiones como las islas pequeñas, el ártico y el continente africano, ejemplificó.
Sobre la experiencia cubana, González Bermúdez destacó que el potencial científico y tecnológico es obra genuina de la Revolución, producto del desarrollo impetuoso de la educación, la creación de la infraestructura y el capital humano especializado en las esferas medioambientales.
De acuerdo con las mediciones de la red mareográfica nacional, el clima de Cuba es hoy más cálido y extremo, la temperatura promedio anual aumentó 0,6 grados Celsius y el nivel del mar ha subido 5,72 centímetros, como promedio, en los últimos 40 años.
Igualmente, se ha observado gran variabilidad en la actividad ciclónica, al tenerse en cuenta que en la primera década del actual siglo afectaron a esta nación caribeña siete huracanes intensos, y más recientemente el "Sandy", con serias consecuencias para la región oriental, subrayó.
La dirección del país ha tomado trascendentales decisiones y orientado sobre las prioridades y acciones en el enfrentamiento a las situaciones excepcionales y los desastres.
Se puede mencionar los estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgo de desastre ante intensas lluvias, penetraciones del mar y fuertes vientos, y la capacitación a las autoridades de los municipios costeros, quienes poseen la información adecuada para la toma de decisiones, especificó.
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