Autor : Caridad Franco Vega
Cuentan que primero creció el algarrobo, luego se entrecruzó la Palma
Real. Hoy ramas y penachos en armonioso maridaje se mecen libres a la
humorada del viento. Caprichosa y erudita naturaleza, que entreveró a
estos dos alegóricos árboles, en una tierra prodiga en simbolismo. Bajo
el follaje de la arboleda, voces calidas y armoniosas entonaron y
corearon un homenaje a la patria y a la cubanía.
La Camerata
Vocal Música Áurea afinó aprovechando la acústica de la hierba.
Modularon, este fue su calentamiento, iniciaron así su gira “Por los
caminos de la Historia”, que los llevará a recorrer y presentarse en
comunidades rurales de montaña y de difícil acceso, como el II y III
Frente Orientales, el poblado de Mella y el sitio histórico Mangos de
Baragua, donde el General Antonio Maceo Grajales protagonizó la
histórica Protesta.
El primer lugar visitado fue Birán, en
particular la finca, donde nació y creció el líder histórico de la
Revolución Cubana Fidel Castro Ruz y todos sus hermanos.
Luego
vendría el pequeño concierto en el pobladito de Birán, al filo del medio
día. Y hubo desmesura y asombro en la mirada de niños, adolescentes, y
personas adultas que tal vez por primera vez, veían y escuchan, así tan
cerquita melodías para ellos desconocidas.
La directora de la
Camerana, Delvis Sánchez, decidió iniciar la presentación del coro
santiaguero, con música del siglo XV. Desafiando, supuestos criterios
que subestiman sensibilidades y consideran que esta gente humilde y
sencilla de pueblo, no es capaz de disfrutarla llamada “música culta”.
Cuando
Delvis, carismática aún en su didactismo, comentaba sobre los tipos de
voces que forman Vocal Áurea (sopranos, contraltos, bajos, tenores,
barítonos) fue interrumpida por alguien que entre el escaso público
respetuosamente preguntó, ¿usted podría enseñarnos cuáles son esos tipos
de voces.? Y claro que entusiasmada pidió a sus cantantes hacer una
demostración. Y hasta les reclamó por no estar aún tan afinados como
ella lo exige, “es que aún tiene la cama acuestas, bromeó.
Entonces
con mucho desenfado, pasaron a interpretar la segunda parte del
concierto. Que incluyó temas antológicos del repertorio universal y
cubano.
Esta reportera y el equipo de prensa que me acompañó nos
fuimos aún sin finalizar la presentación, pero satisfechos de oír
corear los estribillos, de “Son Homenaje”, de Juan Almeida Bosque y la
mundialmente conocida invitación “Iré a Santiago”, sobre un poema del
poeta granadino García Lorca y la pícara guaracha “La mujer de Antonio”
de Ñico Saquito.
Este fue sólo el comienzo de la gira de la
Camerata Vocal Áurea, una agrupación que está celebrando su aniversario
10 de creación y que decidió festejarlo de una manera especial:
compartir la buena música que muy bien saben interpretar, desandando los
caminos de la historia patria y compartiendo con gente de pueblo que
agradece y disfruta la música que al decir de José Martí “es la más
bella forma de lo bello”
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