Por José R. Castillo ArgüellesEsta tarde el estadio Guillermón Moncada se escenario de uno de los juegos más atractivos de la jornada a cargo de dos equipos de rancio abolengo en el béisbol cubano: Pinar del Río y Santiago de Cuba, elencos que atesoran en sus vitrinas varios cetros nacionales y son persistentes protagonistas de la postemporada.
Los pinareños llegan al convite como ocupantes de la cuarta plaza de la Zona Occidental con balance de 16 victorias y 15 derrotas (average 516) a 4,5 juegos de diferencia de los líderes matanceros y por detrás de Cienfuegos e Industriales que le sacan 2 juegos.
Las Avispas, por su parte, marchan en la tercera casilla de la Zona Oriental con saldo de 16 ganados y 9 perdidos (average 640) a sólo 1,5 juegos del vanguardista Villa Clara y apenas medio juego por detrás de Ciego de Ávila que ocupa el segundo peldaño.
En el aspecto ofensivo la tropa local exhibe mejores guarismos que sus rivales comenzando por el average de 295 que aventaja el 272 pinareño. Sobresale en el uso del madero la evidente superioridad de los indómitos en el bateo de fuerza como lo prueba el hecho de haber suscrito nada más y nada menos que 43 bambinazos que los convierten en líderes absolutos, mientras los vueltabajeros solamente han logrado 27 películas de cuatro esquinas. Consecuentemente el slugging de las huestes de Alcides Sánchez es de 504, en tanto el de los muchachos de Juan Castro es de 407.
Adicionalmente puede concluirse que los indómitos han bateado con más oportunidad pues suman 152 carreras remolcadas y han dejado 181 corredores en base frente a 127-248 que presentan los pativerdes.
En el aspecto de la velocidad como factor ofensivo cabe destacar que los vueltabajeros han robado 14 bases y los han cogido en 17 oportunidades, mientras que sus rivales sólo han robado 5 y los han atrapado 8 veces.
Desde el punto de vista individual los mejores bateadores pinareños son Lorenzo Quintana con average de 357, Lázaro Blanco 354, Yosvani Peraza 337, Donald Duarte 305 y Osniel Madera 300. El máximo jonronero es Peraza con 7 estacazos y el mejor impulsador William Saavedra con 20.
En la trinchera opuesta sobresalen Maikel Castellanos con promedio de 394, Edilse Silva 370, Joaquín Carbonell 368, Rolando Meriño 326 y Pedro Poll 318. El máximo jonronero es Héctor Olivera con 9 (colíder junto al espirituano Yulieski Gourriel y el avileño Rusney Castillo) y el máximo remolcador Rolando Meriño con 25.
En cuanto al pitcheo la novena occidental tiene mejor desempeño como lo demuestra su promedio colectivo de carreras limpias 3.69, mejor que el 4.36 de los santiagueros.
Individualmente los más ganadores en el elenco visitante son Vladimir Baños (4-2 / 2.75 pcl) y Julio Alfredo Martínez (4-2 / 2.15 pcl); en tanto los hombres más activos de su bulpén son Jesús Guerra (1-1, 5 puntos por juegos salvados / 0.47 pcl) e Irandy Castro (1-0 / 9.45 pcl).
En el otro bando Yaumier Sánchez es el líder indiscutido entre los iniciadores con (3-0 / 1.35 pcl), seguido por Alaín Delá (3-1 / 4.05 pcl) y Danny Betancourt (3-2 / 3.76 pcl); mientras que en el rol de relevo sobresalen Alberto Bicet (1-0, 4 puntos por juegos salvados / 3.29 pcl) y Osmany Tamay0 (2-1, 1 punto por juego salvado / 4.82 pcl).
Finalmente, quiero cerrar estos apuntes preliminares sobre la interesante porfía que comenzará en apenas unas horas refiriéndoles que en el renglón de la defensa los pinareños le sacan escasos dos puntos a sus adversarios 973-971, lo que refleja una clara paridad entre ambos elencos.
La interpretación de estos guarismos me hace preludiar que la confrontación se dibuja como una porfía entre el empuje ofensivo de las Avispas y el contrapuesto dique que supondrá el pitcheo del Tsunami Verde.
Si Santiago logra descifrar los lanzamientos de los vueltabajeros avanzará por la senda de la victoria, por el contrario si su artillería es silenciada entrarán en terreno pantanoso.
No nos impacientemos, faltan sólo pocas horas para deleitarnos con este duelo de titanes.
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