Por Maria Antonia Medina Téllez
Santiago de Cuba, 30 mar.— Con la mirada en las sesiones finales del XXI Congreso de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), en abril de 2019, se desarrollo, en esta urbe, el Pleno de la organización obrera en la provincia de Santiago de Cuba.
El enfrentamiento al delito e ilegalidades y cómo desde el movimiento sindical que concreta la producción y los servicios, y se pueden mejorar los indicadores económicos, fue el tema principal de los debates con el llamado a demostrar conocimiento en términos laborales, económicos y jurídicos.
Dirigentes de los sindicatos en los nueve municipios evaluaron el cumplimiento de la economía, que en el territorio creció en un 2,6 por ciento, aun cuando en las ventas netas incumplieron 37 entidades, entre esta las empresas Lácteos, Gastronomía, Azucarera y BioCubaFarma.
María de los Ángeles Cordero, secretaria general de la CTC provincial, remarcó la idea de que para asegurar la prosperidad y sostenibilidad del socialismo cubano y que las personas encuentren satisfechas sus necesidades, hay que crear riquezas, que significa producir y es uno de los asuntos principales del Congreso.
Esa misión tiene que ser acicate para el trabajo cotidiano del sindicato, incrementando el combate ante las indisciplinas y violaciones en sectores productivos y de servicios que impactan en la vida de la población, como Comercio minorista y Gastronomía que incidieron en el bajo desempeño de la circulación mercantil.
Durante el pleno se reconoció cuánto queda por hacer para perfeccionar la política de cuadros, ganar en autoridad y desterrar el concepto de que la gestión sindical es algo formal cuando el país implementa un proceso de cambios que incluyen formas de gestión no estatales, acotó Maura Portales, de la CTC nacional.
Descontrol, no fiscalización, cadena de impagos, mal aprovechamiento y desvío de recursos fueron violaciones mencionadas y que incluso llevan al no pago en tiempo de los salarios, lo cual refleja falta de funcionamiento y enfrentamiento en la base, sin compadreos y exigiendo a las administraciones.
Se conoció que la CTC participó activamente en los cambios estructurales y procesos de reordenamiento laboral aprobados en entidades, con un potencial estimado de más de dos mil 900 trabajadores a declarar disponibles en el territorio, por falta de materia prima y disminución de la actividad.
Igualmente, finalizó la presentación e información a los afiliados del plan y presupuesto para el 2019, con planteamientos reiterados para completar útiles y herramientas de trabajo, suministros estables para inversiones planificadas y el mejoramiento del transporte obrero y de carga.
Otros criterios de los afiliados santiagueros para materializar el plan de producción en sus centros, fueron la garantía de materia prima con mayor calidad y enfocados en la disciplina laboral y tecnológica, así como definir el presupuesto destinado a la estimulación moral y material.
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