Santiago de Cuba, 5 mar.— Dolorosa y triste Para Venezuela, Cuba, América Latina y el mundo, fue la tarde-noche de aquel martes 5 de marzo de 2013, cuando en el hospital militar de Caracas falleció el Comandante Hugo Chávez Frías, después de batallar arduamente contra la cruel enfermedad que lo abatía durante más de dos años.
Pero no hay hombres inmortales y la
batalla por su vida no se perdió sino que lo hizo más gigante todavía,
porque aún a costa de los riesgos que representaba la enfermedad, supo
mantenerse hasta el último aliento al frente de la patria que tanto amó y
por la que tanto hizo durante su corta existencia, sobre todo para
darle a los venezolanos patria y dignidad que fue el sueño inconcluso
del Libertador Simón Bolívar.
Como expresara la nota dada a conocer por Cuba tras su muerte: “El Presidente Chávez ha protagonizado una extraordinaria batalla a lo largo de su joven y fecunda vida. Lo recordaremos siempre como militar patriota al servicio de Venezuela y de la patria grande, como honesto, lúcido, osado y valiente luchador revolucionario, como líder y Comandante supremo que reencarnó a Bolívar para hacer lo que él no pudo terminar, fundador de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños”.
Chávez brilló como estadista en muchas batallas internacionales enfrentando al imperialismo, siempre en defensa de los oprimidos del mundo, porque él como José Martí consideraba que Patria es Humanidad. Chávez siempre fue un gran amigo de Cuba y consideraba a esta pequeña isla caribeña también como su tierra natal, y en reciprocidad, los cubanos lo admiramos y consideramos como un hermano. Por siempre estuvo a nuestro lado en medio de todas las dificultades afrontadas por nosotros, sobre todo durante los años más difíciles del período especial. Su amistad fue a toda prueba, incondicional, sincera y leal.
Ejemplar fue la amistad de Chávez con Fidel a quien consideraba como un padre y como un maestro revolucionario por sus enseñanzas y por su ejemplo de líder inclaudicable frente al enemigo más poderoso de la tierra: el imperialismo norteamericano.
El tiempo ha pasado en cuatro años desde su muerte el 5 de marzo de 2013, pero como expresara un poeta: “el tiempo no devora redentores”, y el Comandante Hugo Chávez Frías fue uno de ellos, por eso él está, no en el corazón de Venezuela, sino en el de todo el mundo que lo recordará hoy con tristeza, pero con la satisfacción de saber que desde entonces, hemos sido fieles a su lealtad, sus ideales y su memoria, y en todas y cada una de las batallas por librar él estará a la vanguardia, ¡Hasta la Victoria Siempre!
Como expresara la nota dada a conocer por Cuba tras su muerte: “El Presidente Chávez ha protagonizado una extraordinaria batalla a lo largo de su joven y fecunda vida. Lo recordaremos siempre como militar patriota al servicio de Venezuela y de la patria grande, como honesto, lúcido, osado y valiente luchador revolucionario, como líder y Comandante supremo que reencarnó a Bolívar para hacer lo que él no pudo terminar, fundador de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América y de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños”.
Chávez brilló como estadista en muchas batallas internacionales enfrentando al imperialismo, siempre en defensa de los oprimidos del mundo, porque él como José Martí consideraba que Patria es Humanidad. Chávez siempre fue un gran amigo de Cuba y consideraba a esta pequeña isla caribeña también como su tierra natal, y en reciprocidad, los cubanos lo admiramos y consideramos como un hermano. Por siempre estuvo a nuestro lado en medio de todas las dificultades afrontadas por nosotros, sobre todo durante los años más difíciles del período especial. Su amistad fue a toda prueba, incondicional, sincera y leal.
Ejemplar fue la amistad de Chávez con Fidel a quien consideraba como un padre y como un maestro revolucionario por sus enseñanzas y por su ejemplo de líder inclaudicable frente al enemigo más poderoso de la tierra: el imperialismo norteamericano.
El tiempo ha pasado en cuatro años desde su muerte el 5 de marzo de 2013, pero como expresara un poeta: “el tiempo no devora redentores”, y el Comandante Hugo Chávez Frías fue uno de ellos, por eso él está, no en el corazón de Venezuela, sino en el de todo el mundo que lo recordará hoy con tristeza, pero con la satisfacción de saber que desde entonces, hemos sido fieles a su lealtad, sus ideales y su memoria, y en todas y cada una de las batallas por librar él estará a la vanguardia, ¡Hasta la Victoria Siempre!
No hay comentarios:
Publicar un comentario