Santiago de Cuba, 20 ene.— Con unas cinco mil 420 parejas asistidas en las consultas de planificación familiar en 2016, y 10 nacimientos logrados en las de Atención a la Pareja Infértil (API), se refuerza en la provincia de Santiago de Cuba la labor para fomentar la fecundidad y natalidad.
Yofaidy Pérez, funcionaria del Programa
Materno Infantil en el territorio, explicó a la ACN que en ese periodo
aumentaron los interesados en evaluar su riesgo reproductivo
preconcepcional e informarse ante la decisión de tener un bebé, en aras
de un embarazo satisfactorio, en bien del niño y de la madre.
Uno de los objetivos en 2017 es consolidar la atención de vulnerabilidades preconcepcionales desde la Atención Primaria de Salud (APS), con el fin de identificar y modificar condiciones que puedan afectar a la gestante y su descendencia, y, además, con vistas a que se conozca y valore el mejor momento para una procreación sana, subrayó.
Pérez comentó que las acciones de planificación familiar -accesibles desde la APS y consultas especializadas en policlínicos-, así como las acciones de promoción para la salud efectuadas a nivel intersectorial, influyeron en que el pasado año disminuyeran en la provincia los índices de aborto y de embarazo en adolescentes.
Respecto a la API, Pérez refirió que los 10 nacimientos en 2016 fueron posibles gracias al trabajo sostenido en las consultas de esa especialidad, disponibles en cada localidad y en el Centro de Reproducción Asistida de Baja Tecnología, en el Hospital General Doctor Juan Bruno Zayas, de esta urbe.
Dijo que tales alumbramientos son parte de los 12 mil 420 ocurridos en la provincia en esa etapa, mil 118 menos respecto a 2015 y con mortalidad infantil de 4.4 por cada mil nacidos vivos, la tercera más baja en la historia del territorio y superada por las tasas de 3.8 y de 4.2, obtenidas en 2014 y 2015, respectivamente.
Asimismo, disminuyó el índice de bajo peso al nacer con 67 niños menos nacidos con esa condición, y se redujo la mortalidad en edad escolar, lo cual es prioridad junto a una sólida labor preventiva que empieza por la familia, para evitar accidentes, la causa de más del 50 por ciento de tales lamentables pérdidas, señaló.
Para 2017, apuntó, trabajarán por una mejor calidad de la atención prenatal y de puericultura en niños de cero a 18 meses, y por incentivar la superación profesional, además de la labor intersectorial en aras del ingreso oportuno de las gestantes ante cualquier riesgo y la asistencia a consulta de menores de un año.
Aunque la provincia cuenta con un mayor número de personas interesadas en planificar su maternidad o paternidad, se insistió en la importancia de detectar a tiempo el riesgo reproductivo preconcepcional, lo cual es garantía para construir un proyecto de vida personal y familiar de forma responsable, y con salud.
Uno de los objetivos en 2017 es consolidar la atención de vulnerabilidades preconcepcionales desde la Atención Primaria de Salud (APS), con el fin de identificar y modificar condiciones que puedan afectar a la gestante y su descendencia, y, además, con vistas a que se conozca y valore el mejor momento para una procreación sana, subrayó.
Pérez comentó que las acciones de planificación familiar -accesibles desde la APS y consultas especializadas en policlínicos-, así como las acciones de promoción para la salud efectuadas a nivel intersectorial, influyeron en que el pasado año disminuyeran en la provincia los índices de aborto y de embarazo en adolescentes.
Respecto a la API, Pérez refirió que los 10 nacimientos en 2016 fueron posibles gracias al trabajo sostenido en las consultas de esa especialidad, disponibles en cada localidad y en el Centro de Reproducción Asistida de Baja Tecnología, en el Hospital General Doctor Juan Bruno Zayas, de esta urbe.
Dijo que tales alumbramientos son parte de los 12 mil 420 ocurridos en la provincia en esa etapa, mil 118 menos respecto a 2015 y con mortalidad infantil de 4.4 por cada mil nacidos vivos, la tercera más baja en la historia del territorio y superada por las tasas de 3.8 y de 4.2, obtenidas en 2014 y 2015, respectivamente.
Asimismo, disminuyó el índice de bajo peso al nacer con 67 niños menos nacidos con esa condición, y se redujo la mortalidad en edad escolar, lo cual es prioridad junto a una sólida labor preventiva que empieza por la familia, para evitar accidentes, la causa de más del 50 por ciento de tales lamentables pérdidas, señaló.
Para 2017, apuntó, trabajarán por una mejor calidad de la atención prenatal y de puericultura en niños de cero a 18 meses, y por incentivar la superación profesional, además de la labor intersectorial en aras del ingreso oportuno de las gestantes ante cualquier riesgo y la asistencia a consulta de menores de un año.
Aunque la provincia cuenta con un mayor número de personas interesadas en planificar su maternidad o paternidad, se insistió en la importancia de detectar a tiempo el riesgo reproductivo preconcepcional, lo cual es garantía para construir un proyecto de vida personal y familiar de forma responsable, y con salud.
No hay comentarios:
Publicar un comentario