Autor: Marta Cabrales
Las altas temperaturas que calcinan esta ciudad del oriente de Cuba parecen competir con las energías humanas empeñadas en
transformarla y embellecerla, ahora en medio de una prolongada falta de lluvias que vuelve a poner a prueba a su gente.
Si los vientos del huracán Sandy se ensañaron hace casi seis meses y no han faltado leves temblores perceptibles, la urbe sigue levantándose y encuentra las motivaciones en los 60 años del asalto al Cuartel Moncada, a conmemorarse en julio próximo, y el medio milenio de su fundación.
El arquitecto Omar López, director de la Oficina del Consevador de la Ciudad (OCC), precisa que la primera de esas celebraciones, el 26 de julio, recordará en su propio ámbito el ataque a la que en 1953 era la segunda fortaleza militar del país, protagonizado por el líder histórico Fidel Castro y jóvenes revolucionarios, en tanto que la segunda ocurrirá en el 2015.
Destaca el laboreo que se aprecia en las cuatro áreas del complejo monumental nombrado con esa fecha, en cuyo centro se yergue el antiguo enclave castrense, rodeado por el Palacio de Justicia, el parque Abel Santamaría y la Escuela Normal Frank País.
En este ajetreo, puntualiza, son importantes los trabajos de señalización vial, con un diseño moderno, vistoso y funcional, que facilita la circulación en sus calles, avenidas e intersecciones, después del desbarajuste enorme del arbolado tendido en el suelo.
Entre los puntos focales está la Plaza de la Revolución Antonio Maceo, donde se acomete un remozamiento completo que revitalizará el esplendor de hace poco más de 20 años, cuando quedó inaugurada en la clausura del IV Congreso del Partido Comunista, agrega el arquitecto.
Otro de los vórtices resaltados por el director de la OCC está en la emblemática Plaza de Marte, cuyos alrededores se transforman para convertirla en ámbito cultural y comercial por excelencia. Allí, en una de sus esquinas, el centro cultural Iris Jazz Club resulta una de las novedades con el privilegio para esegénero musical.
López apunta que en otro de los costados, el Café Mamá Inés rinde culto a esa ancestral tradición y ofrece un entorno tranquilo para degustar la bebida, bajo los acordes de canciones de Ignacio Villa, el gran Bola de Nieve, y con las posibilidades de encuentros literarios.
En este recorrido por el centro histórico, transeúntes expresaron el agrado por los cambios en la calle Heredia, arteria vital que conduce al corazón urbano, el parque Céspedes. Entre las novedades están una nueva tienda de artesanía y otra dedicada exclusivamente a los abanicos confeccionados por "orfebres"de esas piezas.
Igualmente, se refirieron al indudable protagonismo cultural que le otorgan la biblioteca provincial Elvira Cape, la sede de la Unión Nacional de Escritores y Artistas, la Casa-museo donde nació el primer poeta nacional, la Casa de la Trova y la primera catedral metropolitana de la Isla.
Santiagueros y visitantes que transitan por la avenida Enramadas la reconocen como la más populosa de las vías, con una notable actividad comercial y habitual punto de encuentro para personas que se saludan y conversan brevemente en medio de la agitación de la vida moderna.
Igualmente elogiaron al Callejón del Carmen que desde hace pocos años ofrece un pintoresco paso peatonal en el cual convergen artesanos con variadas alternativas de servicios.
La doctora María Elena Orozco, presidenta de la Cátedra de Estudios Franceses Montaigne-Montesquieu, aporta elementos en la afirmación identitaria y se refiere a la tarja develada hace pocos meses en honor al cartógrafo francés Luis Francisco Delmés en la pared exterior de la céntrica florería Yarima.
La profesora de la Universidad de Oriente enfatiza en que la presencia gala es una de las huellas perdurables en la urbe y esa iniciativa se empeña en revelarla en todas sus aristas.
Entre los sitios al que aluden los santiagueros en este panorama transformador de su ciudad está el teatro Martí, uno de los más añejos y entrañables, que recibe una reconstrucción general, después de los destrozos ocasionados por los vientos, a poco tiempo de un remozamiento realizado a sus estructuras.
También focalizan parte de estos empeños en las áreas verdes, que han crecido gracias a los trabajadores de Servicios Comunales y ponen su nota esperanzadora en el entorno, aunque la escasez de lluvias dificulta la jardinería.
Son muchos los que ya extrañan la abundancia de mangos que cada año para esta fecha marca la fisonomía urbana con su dulzura y variedad verde-amarilla. Saben, además, que otra merma sentida será la de los aguacates, aunque estos se ven más en los meses finales del año.
Autoridades de la provincia de Santiago de Cuba fijan entre las prioridades la construcción acelerada de viviendas para resarcir en parte la mayor de las desgracias acarreada por el meteoro.
En ese sentido, los santiagueros recordaron las palabras del principal dirigente político de la provincia, Lázaro Expósito, de que no puede haber olvido mientras falten techos y haya familias sumidas aún en la desolación.
Con conocimiento de causa, los habitantes de la urbe conocieron la reciente noticia: el nombre de Sandy ya fue borrado por la Organización Meteorológica Mundial, hasta el 2018, de la lista para denominar esos fenómenos, a causa de su dañino comportamiento en Cuba y otras naciones del área. En su lugarfue adoptado el de Sara.
En Abril, los santiagueros recibieron como una bendición los primeros aguaceros del año.
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