Santiago de Cuba, 12 ene.— La villa que otrora fuera la primera capital del país, desde su fundación en 1515 hasta 1556, se reconoce en su historia pasada y presente, a través de emblemáticos inmuebles que forman parte de su patrimonio edificado.
Es así como la Santa Basílica Metropolitana Iglesia Catedral, ubicada en el anillo cero de la urbe, conocido como Parque Céspedes, ha acompañado a los santiagueros por más de 500 años, y más que un símbolo es el rostro de una ciudad que reserva excepcionales valores culturales de la nación.
Hoy el centro colonial luce realmente majestuoso, al igual que la Zona Monumental 26 de julio, el Corredor Patrimonial Las Enramadas o el Paseo Marítimo. “Se ha trabajado con esmero e integralmente cada espacio, para dotar de belleza, orden urbanístico y disciplina a la Ciudad Héroe de la República de Cuba”, a criterio de Ramón Cobas Avivar, subdirector de la Oficina del Conservador de la Ciudad (OCC).
Al interés de especialistas de diversas disciplinas por desarrollar acertados planes de manejo y gestión de la ciudad histórica, se sumó la voluntad gubernamental y popular con actitudes de respeto y cuidado. Hace más de veinte años, el equipo del arquitecto Omar López, Premio Nacional de Patrimonio Cultural, deja huellas tangibles con investigaciones sociales e históricas publicadas en folletos, revistas y libros que sirven como referente para el resto de las provincias.
Cada espacio de Santiago de Cuba es especial y el pueblo se reconoce en sus ámbitos. Una estrategia de comunicación acompaña la educación ciudadana a través de los medios de comunicación, peñas vinculadas al rescate y puesta en valor del patrimonio como “Escalinata”
y “Desempolvando”, proyectos socioculturales como “El surtidor de sueños” y la Casa Heredia, entre otros. No se trata solo de la puesta en valor de un inmueble, monumento o sitio histórico, sino de su reconocimiento disfrute, uso responsable y sostenible.
En tal sentido los proyectos de colaboración internacional Los caminos del café y del Paisaje Cultural Asociativo El Cobre, son puentes para el éxito, según explicó Omar López, quien también se desempeña como director de la OCC.
Y como sin historia no hay memoria, Santiago también miró hacia el fondo de su rada, donde se encuentra el Parque Arqueológico Subacuático vinculado a la batalla naval de 1898, justo en el aniversario 120 de la contienda entre Estados Unidos, España y Cuba. Pero, sin lugar a dudas, el sitio que acapara la mayor atención es el cementerio Patrimonial Santa Ifigenia.
En el camposanto descansan personalidades que trazaron pautas en la historia de la nación, por lo que llegar allí es necesidad, para conocer el devenir de las luchas libertarias.
La ciudad de 50 Monumentos Nacionales, tres elementos declarados Patrimonio de la Humanidad: la Tumba Francesa la Caridad de Oriente, el Sitio Histórico Castillo del Morro San Pedro de la Roca y el conjunto de haciendas de las Primeras Plantaciones Cafetaleras en el Sudeste de Cuba, es ejemplo del trabajo cohesionado e intencionado por un bien común.
¿Qué falta mucho para lograr mejores resultados? Es cierto, pero no se puede dejar de reconocer todo cuanto se ha hecho y hace hasta hoy.
Por eso la historia pasada y presente deviene pretexto artístico para músicos, poetas, pintores, fotógrafos y realizadores de radio, cine y televisión. Miles de instantáneas e historias recorren el mundo, para enaltecer los valores que se manifiestan cada mañana con los toques de campana de la catedral y la “Elegía a José Martí”, en el camposanto de la Muy noble y muy leal Santiago de Cuba.
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