Una propuesta para bien de la cultura nacional

Por Mariano Aldana Villalón

Santiago de Cuba, 5 jun.— La propuesta de convertir en festival nacional “El Platanal de Bartolo” es apoyada por todos los sanluiseros que hacen posible esta fiesta campesina y por muchos santiagueros.

Yo pertenezco a estos últimos, pero considero el empeño muy justo por varias razones. Lo primero que salta a la luz es que el festival es único y tiene como objetivo preconizar la cultura tradicional y popular de nuestros campos.

También, resaltan los atractivos del programa que incluye competiciones y actividades propias de la campiña. Se incluyen por ejemplo, festivales del Pilón –pilar café-, del maíz, de las flores, y bebidas típicas campesinas.

También se relacionan El Bembé de Sao, Encuentro de Galleros Asociados, Feria de arte popular, celebraciones de bodas y quince y la confección de comidas criollas.

Al decir de José Lino Pérez, uno de los fundadores del festival, cada año son muchos los compañeros de diferentes partes de la geografía cubana que se interesan por participar en cada edición.

El Platanal de Bartolo reafirma la cubanía, sentenciaba este sanluisero de pura cepa, para agregar de inmediato ahí es donde está acogida del Festival porque la gente rememora aquellas costumbres.
       
Hay que tener en cuenta además hay una generación que las recuerda, pero también hay una que no vivió esas ricas experiencias y por eso es bueno que sepan cómo vivían nuestros campesinos y de sus sacrificios.

Por todo lo ante expuesto y las enseñanzas que acumula esta fiesta popular hasta esta décimo cuarta edición, yo doy mi voto e invito muchos cubanos que hagan lo mismo para convertir en festival nacional “El Platanal de Bartolo”.

Si el próximo año viene con esa envestidura, muy bien lo agradecerá la cultura en el municipio San Luis y la provincia Santiago de Cuba.

En esta ocasión el festival fue dedicado a la cooperativa “Sabino Pupo” y a los 40 años de la Casa de Cultura Manuel Armero Sánchez, en tanto que Juana Ofelia Salazar, animadora de este evento y Gustavo García Hernández, presidente de la Sabino, fungieron como presidentes de honor.