Por PLSantiago de Cuba, 12 feb.— Las principales autoridades de esta provincia oriental expusieron la estrategia para enfrentar la escasez de agua para la población y otros usos, debido a la intensa sequía que ha mermado los volúmenes embalsados.
A poco más de dos años del azote
devastador del huracán Sandy, el territorio atraviesa una difícil
situación, con menos del 40 por ciento del líquido en sus 11 presas y un
notable alargamiento en los ciclos de distribución al sector
residencial y restricciones para la actividad agrícola, industrial y de
servicios.
La ciudad cabecera, secularmente afectada por la insuficiencia hídrica, experimentó una sustancial mejoría con la puesta en marcha en los últimos años de un moderno acueducto que sustituyó añejas y defectuosas redes y posibilitó un suministro estable y sistemático del necesario líquido.
El Primer Secretario del Partido Comunista en la provincia, Lázaro Expósito, instó a la disciplina, el rigor y la organización en las acciones emprendidas para aliviar el tenso panorama y hacer el más racional empleo de los recursos materiales dispuestos para salir adelante.
Por su parte, Reynaldo García, Presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular, enfatizó en la agilidad de las direcciones administrativas en pos de garantizar las soluciones posibles y en la necesidad de atender las opiniones de la población en medio de estas complejidades.
Entre las principales obras para mitigar las afectaciones está la construcción, en menos de tres meses, de más de siete kilómetros de una conductora que aportará caudal a la principal planta distribuidora de la urbe, la perforación de más de 90 pozos y el suministro mediante carros cisternas.
Otros municipios con serias dificultades son los de Palma Soriano, Contramaestre, Songo-La Maya y Julio Antonio Mella, donde también están en marcha decisiones para aliviar la carencia del agua.
Los dirigentes santiagueros insistieron en el ahorro como una premisa esencial para aprovechar al máximo los volúmenes existentes y alargar esas posibilidades hasta los esperados aguaceros, con la eliminación de salideros y controles diarios en los centros estatales que son grandes consumidores.
La ciudad cabecera, secularmente afectada por la insuficiencia hídrica, experimentó una sustancial mejoría con la puesta en marcha en los últimos años de un moderno acueducto que sustituyó añejas y defectuosas redes y posibilitó un suministro estable y sistemático del necesario líquido.
El Primer Secretario del Partido Comunista en la provincia, Lázaro Expósito, instó a la disciplina, el rigor y la organización en las acciones emprendidas para aliviar el tenso panorama y hacer el más racional empleo de los recursos materiales dispuestos para salir adelante.
Por su parte, Reynaldo García, Presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular, enfatizó en la agilidad de las direcciones administrativas en pos de garantizar las soluciones posibles y en la necesidad de atender las opiniones de la población en medio de estas complejidades.
Entre las principales obras para mitigar las afectaciones está la construcción, en menos de tres meses, de más de siete kilómetros de una conductora que aportará caudal a la principal planta distribuidora de la urbe, la perforación de más de 90 pozos y el suministro mediante carros cisternas.
Otros municipios con serias dificultades son los de Palma Soriano, Contramaestre, Songo-La Maya y Julio Antonio Mella, donde también están en marcha decisiones para aliviar la carencia del agua.
Los dirigentes santiagueros insistieron en el ahorro como una premisa esencial para aprovechar al máximo los volúmenes existentes y alargar esas posibilidades hasta los esperados aguaceros, con la eliminación de salideros y controles diarios en los centros estatales que son grandes consumidores.
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