Por José Raúl Castillo
Sumido en interminable temporal desde que comenzó la segunda etapa de la 53 Serie Nacional de beisbol la nave Santiago de Cuba acabó por perder el rumbo y en estos momentos se halla a la deriva mientras el resto de la flotilla avanza con mejor suerte y trata de llegar al ansiado puerto de la clasificación.
Incluso el rezagado Isla de la Juventud tiene a la vista la popa de Holguín y Artemisa y estos, a su vez, avistan a poca distancia a Industriales que en estos momentos marcha en la cuarta posición y marca el linde de la zona de clasificación para los play-off.
Lo de Santiago de Cuba es letra aparte, una catastrófica trayectoria que lo ha llevado a perder catorce juegos de diecinueve celebrados para un escandaloso average de sólo 154 que lo hace irreconocible y lo que es peor, lo convierte en presa de un visible aplastamiento psicológico que lo incapacita para reorientar su marcha.
Ayer el cambio de escenario no significó nada nuevo, pues la espiral del infortunio siguió acompañándolos merced a la fatal combinación de un pitcheo que no logra contener a sus rivales y una ofensiva marcadamente improductiva que pese a una docena de imparables sólo produjo tres carreras, al tiempo que dejó a otros diez corredores quedaban en circulación.
Con esa misma cantidad de jits los Cazadores de Artemisa pisaron siete veces la goma, en tres ocasiones gracias remolques suscritos por el refuerzo camagüeyano Alexander Ayala, quien tuvo una jornada feliz al conectar de 4-3 (un cuadrangular) y anotar una.
Ese despliegue artillero fue defendido eficazmente desde el box por los relevistas Yunieski García (cuatro capítulos) e Israel Sánchez (un episodio), quienes tras la explosión del abridor Miguel Lahera (cuatro entradas y tres limpias) se encargaron de estampar los cuatro ceros finales en la pizarra. Yunieski García se acreditó el triunfo (8-2).
Por las Avispas abrió Alaín Delá (4-4) y fue reemplazado en el quinto por el avileño Yadir Rabí, precisamente para contener a los artemiseños luego que en ese propio inning Santiago de Cuba lograra mediante dos anotaciones estrechar la ventaja local a 4 x 3.
Sin embargo Rabí fue castigado con par de cohetes sucesivos, uno de ellos doblete, y tuvo que ser sustituído por el zurdo Edialbert valentín.
El contramaestrense inició bien su rol de apagafuegos pero en la sexta entrada se le acabó la gasolina y permitió tres carreras que sellarón el saldo final del choque, dos de ellas por el bambinazo de Ayala.
Completó el juego Carlos Manuel Portuondo con un trabajo muy hermético (sin jits en dos y un tercio).
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