Por Ernesto López Garcés
El verano en las montañas del Tercer Frente Oriental Mario Muñoz Monroy
va más allá de lo imaginable. La etapa estival es momento para la
confluencia de diversos sectores y de variedad de opciones diseñadas
para el esparcimiento y la recreación.
Como en toda Cuba el
centro fundamental es el Consejo Popular, pero las actividades llegan
hasta diferentes barrios y comunidades. Especial interés prestan a su
trabajo los instructores de arte y los promotores culturales.
Una
pequeña brigada integrada por la promotora cultural Yusmaris Guerra y
por los instructores de arte Mailén García y Ladismir Marzán dan fe de
la entrega de muchos para el disfrute de otros. Estos jóvenes son
ejemplo de cuánto se puede hacer cuando ante el cumplimiento del deber
prevalece la responsabilidad, el amor y la entrega. Los fines de semana
se convierten en jornadas de intenso trabajo para ellos, mochila al
hombro se trasladan hasta diferentes comunidades para llevar hasta el
nivel de la comunidad variadas propuestas recreativas.
Durante la
mañana interactúan con los niños e imparten talleres sobre diferentes
temas, relacionados fundamentalmente, con las tradiciones culturales de
los cubanos. Así los pequeños encuentran espacios para aprender sobre
teatro, el baile y para compartir diversos juegos y otras actividades de
participación a las cuales se suma la familia. Las mismas continúan
durante la tarde y la noche dedicadas de manera especial para los
jóvenes y los adultos.
De manera similar ocurre en los 8 Consejos
Populares del municipio. Cada día las actividades en un “Verano por
más” llegan a miles de infantes y familias. El ejemplo de Yusmaris
Guerra, de Mailén García y Ladismir Marzán se multiplica en cientos de
jóvenes y adultos.
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