Santiago de Cuba, 6 dic.— En el Parque Céspedes, en veinte paneles se instalaron 130 fotografías de al menos 10 autores. Por treinta días estará ante la vista pública, la exposición colectiva titulada “Yo soy Fidel”, una muestra que desde el gran formato, inmortaliza el rostro de la Cuba que acompañó la urna de cedro con las cenizas de Fidel, desde su salida de La Habana hasta el Cementerio Patrimonial Santa Ifigenia.
El
Parque Céspedes, es el soporte inicial de esta muestra que cierra la
producción de varios productos comunicativos, entre ellos el libro
“Exequias” y el documental titulado “El mérito de seguir vivo”.
“Hay 10 fotógrafos que aportaron obras para la exposición, nosotros comenzamos la búsqueda de imágenes para realizar el documental con fotógrafos de distintos órganos de prensa del país. Estas mismas imágenes sirvieron para elaborar el libro “Exequias” y un documental. Otras se aportaron desde esta ciudad”, comentó Omelio Borroto, uno de los artistas que se incluyó entre los fotógrafos de la citada muestra.
Fotógrafos como Vicente González Díaz, Alcides Carlos González, Juvenal Balán y Juan Carlos Palomo se incluyeron en esta selección. La intención es que sea esta muestra un ofrecimiento itinerante pues está ideada para permanecer por un tiempo prolongado en espacios abiertos.
“Hay 10 fotógrafos que aportaron obras para la exposición, nosotros comenzamos la búsqueda de imágenes para realizar el documental con fotógrafos de distintos órganos de prensa del país. Estas mismas imágenes sirvieron para elaborar el libro “Exequias” y un documental. Otras se aportaron desde esta ciudad”, comentó Omelio Borroto, uno de los artistas que se incluyó entre los fotógrafos de la citada muestra.
Fotógrafos como Vicente González Díaz, Alcides Carlos González, Juvenal Balán y Juan Carlos Palomo se incluyeron en esta selección. La intención es que sea esta muestra un ofrecimiento itinerante pues está ideada para permanecer por un tiempo prolongado en espacios abiertos.
”Lo que estamos viendo aquí puede ser repetido muchas veces en el futuro en Cuba, pues ese proceso de esos 10 días que estremecieron a Cuba y el mundo son una fuente inagotable de imágenes. Las imágenes destilan emociones, la forma en que las personas asumieron, fue muy emotivo el proceso de traslado de las cenizas de Fidel hasta aquí y esta exposición siguió todo el proceso. En el mundo se manejó mucha información en torno a lo que estaba ocurriendo en nuestro país por esos días y una imagen de estas, destruye muchas de las matrices de opinión que se tejieron sobre Fidel y la Revolución Cubana, creo que en eso radica la fuerza de esta exposición”, añadió Borroto.
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