Por José Raúl Castilo ArgüellesSantiago de Cuba, 3 feb.— Está claro, parafraseo el título de una telenovela brasileña que por estos días sale al aire por la Televisión Cubana y lo hago tomando en cuenta que con la sólida plantilla que llevó el equipo de Pinar del Río a la Serie del Caribe 2015 -casi, casi el equipo nacional– era de esperar que el primer choque con los Tomateros de Culiacán deparara el triunfo inicial a nuestra selección tras el proclamado objetivo de avanzar inequívocamente hacia la conquista del cetro.
Pero los tomates terminaron por abrasar
el paladar de los Vegueros porque estaban muy picantes y lo que parecía
casi un entremés acabó por arruinar el debut de Pinar del Río en el
evento caribeño al encajarles derrota con pizarra de 2 carreras por 1
que prende rápidamente la señal de alarma en el plantel cubano.
Una ofensiva constreñida a sólo 6 imparables por el pitcheo mexicano resultó insuficiente para aspirar al triunfo en un juego muy cerrado, caracterizado por el dominio de los lanzadores por ambos bandos pero en el que supieron sacar mejor provecho los Tomateros de Culiacán que con apenas cuatro indiscutibles pisaron la goma en dos oportunidades que pudieron ser tres, si no lo hubiera impedido un formidable fildeo de Yulieski en segunda base.
Por añadidura la única carrera cubana fue posible gracias a robo de Yulieski tras un pelotazo, jugada que a a mi modo de ver pudo ser un claro out si el torpedero retiene la pelota tirada por el receptor pues el tiro fue certero y llegó con tiempo; sin embargo la anotación no lo consideró error. Luego vino un oportuno cohete impulsor de Fréderich Cepeda.
Gran trabajo de los abridores Freddy Asiel Álvarez y Anthony Vázquez.
El intento malogrado de Freddy Asiel de sacar out a un corredor en tercera base en jugada de selección resultó clave para que México negociara el empate en la parte baja del sexto.
En la séptima entrada los Tomateros tomaron definitivamente la delantera frente al relevista Jonder Martínez: boleto, sacrificio y sencillo a la banda derecha (actuaba el apagafuegos Liván Moinelo) produjeron la marca.
En suma los Tomateros pudieron darle concreción a un lema muy a la usanza entre nosotros-más con menos- y con un pitcheo hermético, defensa encomiable y capacidad para hacer lo justo en el momento necesario inclinaron la balanza a su favor; en clara demostración de oficio beisbolero.
Aquí les dejo el box score del juego
Una ofensiva constreñida a sólo 6 imparables por el pitcheo mexicano resultó insuficiente para aspirar al triunfo en un juego muy cerrado, caracterizado por el dominio de los lanzadores por ambos bandos pero en el que supieron sacar mejor provecho los Tomateros de Culiacán que con apenas cuatro indiscutibles pisaron la goma en dos oportunidades que pudieron ser tres, si no lo hubiera impedido un formidable fildeo de Yulieski en segunda base.
Por añadidura la única carrera cubana fue posible gracias a robo de Yulieski tras un pelotazo, jugada que a a mi modo de ver pudo ser un claro out si el torpedero retiene la pelota tirada por el receptor pues el tiro fue certero y llegó con tiempo; sin embargo la anotación no lo consideró error. Luego vino un oportuno cohete impulsor de Fréderich Cepeda.
Gran trabajo de los abridores Freddy Asiel Álvarez y Anthony Vázquez.
El intento malogrado de Freddy Asiel de sacar out a un corredor en tercera base en jugada de selección resultó clave para que México negociara el empate en la parte baja del sexto.
En la séptima entrada los Tomateros tomaron definitivamente la delantera frente al relevista Jonder Martínez: boleto, sacrificio y sencillo a la banda derecha (actuaba el apagafuegos Liván Moinelo) produjeron la marca.
En suma los Tomateros pudieron darle concreción a un lema muy a la usanza entre nosotros-más con menos- y con un pitcheo hermético, defensa encomiable y capacidad para hacer lo justo en el momento necesario inclinaron la balanza a su favor; en clara demostración de oficio beisbolero.
Aquí les dejo el box score del juego
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