Por Rosalina Tamayo Arañó
Palma Soriano, Santiago de Cuba, 4 jun.— Alcanzar el Título de Master en Ciencia implica esfuerzo, tenacidad, inteligencia y virtuosismo. Por eso la Filial Pedagógica palmera recibió a docentes de todas las educaciones que han demostrado el verdadero valor de la investigación científica cuando sus resultados son introducidos en la práctica logrando cambios en el comportamiento educativo y revelando transformaciones como consecuencia de la intervención pedagógica.
Palma Soriano, Santiago de Cuba, 4 jun.— Alcanzar el Título de Master en Ciencia implica esfuerzo, tenacidad, inteligencia y virtuosismo. Por eso la Filial Pedagógica palmera recibió a docentes de todas las educaciones que han demostrado el verdadero valor de la investigación científica cuando sus resultados son introducidos en la práctica logrando cambios en el comportamiento educativo y revelando transformaciones como consecuencia de la intervención pedagógica.
El Doctor en Ciencia Alexis Elías
Hernández saludó a los Master que recibían su título en representación
de los 64 que en el municipio serán acreedores de este grado académico
hasta alcanzar la cifra de mil 283 en la Maestría en Ciencia de la
Educación en amplio acceso en sus cuatro ediciones. El impacto de esta
maestría se ha percibido no solo en las transformaciones del modo de
actuación del profesional, sino especialmente, en el modo de actuación
de los alumnos,en la calidad del aprendizaje, en la expresión
sistemática y consciente de una cultura general integral.
El momento de entrega de los títulos de Master fue emocionante unos reían, otros lloraban, se abrazaban a sus seres queridos, agradecían a sus tutores y amigos por el apoyo recibido. Alcanzar ese grado científico recompensa las horas de insomnios, la búsqueda incesante de información, los accidentes tecnológicos y reafirman el amor por la ciencia y la verdad. (Con la colaboración de Ilena Labrada Gallardo )
El momento de entrega de los títulos de Master fue emocionante unos reían, otros lloraban, se abrazaban a sus seres queridos, agradecían a sus tutores y amigos por el apoyo recibido. Alcanzar ese grado científico recompensa las horas de insomnios, la búsqueda incesante de información, los accidentes tecnológicos y reafirman el amor por la ciencia y la verdad. (Con la colaboración de Ilena Labrada Gallardo )
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