La construcción acelerada de viviendas es la más importante acción impulsada hoy en esta provincia para resarcir el mayor de los perjuicios ocasionados por el huracán Sandy en la madrugada del 25 de octubre último.
Reynaldo García Zapata, presidente del gobierno en este territorio oriental, informó que estos cinco meses han sido de preparación de las condiciones materiales y humanas para emprender un auge mayor a partir de abril próximo en la edificación de esos inmuebles.
Cifradas en más de 171 mil 300 las casas dañadas, equivalentes a alrededor de la mitad del fondo habitacional santiaguero, apuntó, el plan prevé levantar hasta el 2019 unas 81 mil 066, mediante tecnologías modernas y rápidas.
Precisó que el empeño principal será en el municipio cabecera, por ser el de mayor afectación, y las viviendas se distribuirán en los repartos José Martí, Abel Santamaría y Antonio Maceo, entre otros, donde se combinarán algunos edificios altos con diversas modalidades.
Otros barrios que recibirán ese beneficio, resaltó, serán los del litoral como Mar Verde, por donde penetró el ciclón; Juraguá, Punta Gorda, Caracoles y Siboney, junto a otros como Boniato, El Cañón y Palenque, entre varios más.
Expresó García que lo acontecido en Santiago de Cuba durante y después del fenómeno meteorológico se convierte en un referente para el país, al ser la primera vez en que un huracán atraviesa una ciudad cubana con una fuerza tan descomunal.
El movimiento de tierra y otras acciones constructivas marcan la arrancada de un ambicioso programa que tendrá entre sus elementos más visibles una de las tres entradas principales a la urbe, por la autopista nacional, que se tornará un área residencial.
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